La OTRA REALIDAD de BILLY

Subo lentamente unas escaleras de piedra pómex en las que esta adherida una alfombra tan roja como las lagrimas de Cristo, Si, alguna vez las vi por la televisión, tan parecidas a la sangre que le brotaba de la cabeza, cuando le pusieron raudamente la corona de espinas, pero no puedo odiar a los judíos…debo seguir en este mundo de fantasía o de locura, debo llegar al final, las escaleras ahora van hacia abajo, en el lado derecho hay un abismo, no me atrevo a mirar, me agarro de las paredes rocosas, que se encuentran en el lado izquierdo, temo caer, cada vez que voy avanzando, las gradas se tornan más estrechas, escucho pasos atrás, miro hacia arriba, una especie de remolino celeste forman figuras amorfas, me siento en una gradita, contemplo, tiemblo, escucho los pasos de atrás cada vez  más fuertes, son golpes de taco, ¿será mi padrastro?, comienzo a correr, a ese hombre lo tengo mucho temor, aunque cuando estoy cerca de él, pongo porte de militar, no quiero que huela mi miedo, no me atrevería a golpearlo, porque es más fuerte que yo y me ha golpeado muchas veces, tengo ganas de llorar, “los hombres no lloran, carajo”, es verdad, el me lo dijo una vez, solo lo mire, y el leyó mi mirada, e intuyo que le decía  “y tú porque no lloras padrastro, si eres una mujer, si eres un marica”, entonces fue cuando se lanzo salvajemente sobre mi menuda persona, y su taco fue a dar contra mi cabeza, que ya esta demasiada tronada…desperté después de cierto tiempo, lo primero que vi fue su fingida sonrisa, con un fondo de salsa de Héctor Lavoe, se puso a cantar y me dijo muy alegre que ya tenía nueva madre, aunque debería ser segundo padrastro o señorito, era bigotudo, escuálido, de facciones finas, y tenía voz de pájaro, me acaricio con el dorso de su mano mis cabellos, aun sentía el dolor del tacazo que mi padre a la cabeza me lanzo., no dije nada del dolor que sentía, es mejor callar, callar, siempre he callado, jamás me he revelado, no he contestado mal, a veces siento que estoy muerto, o quisiera estarlo, eso pensaba, mientras mi padrastro Juan se besaba ardientemente con el bigotudo. Yo miraba estupefacto, el bigotudo, me miro de reojo “vamos a otro sitio Juan”, pero mi tutor, lo agarro con fuerza, ¡ con fuerza que lo tiene porque todos los días alza pesas, hace planchas, barras y mancuerdas!, por eso tiene los pectorales anchos, fuertes y robustos, pero sus piernas son delgadas, parecen tallarines, son como las de Oliva, la novia de Popeye, rió, me carcajeo, ahora quien me mira es mi padrastro, sus ojos son verdes, pero cuando me mira con cólera se vuelve como los del diablo, rojos incandescentes, su rostro tosco se acentúa, de pronto saca el crochet que acopiaba sus cabellos largos y castaños , menea sus cabeza, se me acerca, quiero llorar, no puedo, no se fingir, no se actuar, o no tengo sensibilidad, ¿Cuándo lo perdí?, de un porrazo, bota la sabana que cubre mi cuerpo desnudo. Me empuja con fuerza, voy al suelo, ¡Malditos padres porque me abandonaron, donde están para protegerme!, ¡ fuck  shit, padre, fuck  shit madre, porque tuvieron que irse con el auto al abismo del negro pasamayo, dejándome tan solo, solito con mi tío fuck  shit que no puedo decirlo tío, sino padrastro, cuando no sé si es mi padrastro o mi tío, o un marica!, ¡Es un marica!. Le grito a mi musculoso  padrastro ¡Marica! ¡Marica! ¡Marica! ¡Marica!... ¡Oh, mi Dios, no puedo detenerme! ¿Qué me pasa!...

El musculoso me mira muy enojado, el Bigotudo se acerca, con su voz de pájaro dice cosas extrañas, me mira mi aparato genital, estoy temblando, no quiero ser como ellos, he escuchado que son rarezas del mundo, aunque más raro, me considero yo, “Tom, agárralo, de las piernas, hoy conocerá la verdad del dolor”, miro desesperado, salto de la cama, estoy desnudo, me siento ágil soy tarzan, esquivo las manos del padrastro Juan y de su pareja Tom, grito como loco, es mi mejor manera de expresarme.  Violento ante el mundo, abro la pesada puerta de hierro, veo una tremenda luz, estoy en la calle, hay un sol tremendo, atrás mío están los distorsionados, aunque yo estoy más, me corro, me voy, me siento como una liebre, o soy un ave, me voy, me voy…

Sigo bajando las escaleras, y me vienen imágenes, mi cabeza parece latir como un agitado corazón , me suda el cuerpo y a la vez me pica, por momentos siento mucho calor…ese día que salí a la calle después de muchos años, mi padrastro y su pareja, tropezaron al mismo tiempo, Yo estoy en  la ciudad, corro como una cabra loca, la gente me mira boba, no siento temor, estoy como Adán, desnudo en el paraíso de la calle, mi correr se detiene ante la mirada de un hombre muy parecido a mi padrastro, todo se me ensombrece, me da escalofríos, retrocedo temeroso, el me sigue mirando, me voy, llego a un parque, ahora siento vergüenza de mi, la mirada de aquel hombre, me ha cortado las alas.

Me siento bajo un árbol doblado de un parque inmenso, puedo tocar sus ramas, sus hojas, escuchar el cantar de los pájaros, ¿Por qué menciono tantas veces pájaro?, será la única manera de mencionar a los pájaros, ¡dije de vuelta la palabra pájaro! que se me viene a presentar de manera obsesiva en mi mente,  me tortura, ahora escucho su canto, en mi mundo no está el pájaro pero si su canto, solo está la palabra, sin imagen pero con canto, y se repite se repite y sigue y sigue…

Una mano helada me toca el hombro desnudo, estoy estático, viviendo en mi obsesión, o sufriendo en el, veo un rostro es negro, de ojos grandes, de boca pequeña, es inmenso, así lo siento, grande, y yo muy pequeño.

_ ¿Cómo te llamas?

_ Mi nombre es Billy

_ Billy y ¿dónde vives?

Su voz es suave, me da serenidad, la obsesión se aleja de mí, aunque no del todo.

_ Vivo por allá, mire por allá

_ mmm, ¿Y con quien vives?

_ Con Juan

_ ¿Juan es tu padre?

Comienzo a temer, comienza a averiguar de mí, no se porque sigo respondiendo, parezco robot, ¿Dónde está mi voluntad?, estoy como hipnotizado.

_ No, Juan es mi padrastro, mis padres murieron en un accidente de carro, Juan es mi tío, Juan es mi padrastro.

_ ¿Qué edad tienes?

_ Tengo 11 años, 8 de mayo cumplo 12, que mes estamos.

_ Febrero, y dime ¿por qué estas desnudo?

_ Juan dijo que me volvería hombre.

_ ¿tu padrastro?

_ Si, el, junto a su pareja Tom

El negro, puso un gesto de asombro, sonreí, pues iba a decir algo, pero se quedo con la palabra en la boca, en su boquita, que parece una cuevita, observo su boca, sus dientes, por televisión sé que hay gente de color oscura. ¿Sera  este un caníbal?, ¿no será uno de ellos?, no, no creo, este se ve bueno.

_ ¿El es homosexual?_ pregunta el señor negro.

_ No, Es marica

Marica, eso lo había escuchado en la televisión, cuando un tipo le dijo a un peluquero “maricón de mierda, mira lo horrible que me has dejado el cabello”, el peluquero, se parecía a mi Padrastro Juan, que también labora en un salón de belleza.

_ Oye niño, escucha, ¿en qué piensas?

Es la primera vez, que alguien me pregunta, que es lo que pasa por mi mente, me alegra, como me gustaría que el fuese mi padrastro, y además no es caníbal.

_ Por mi mente fluye, muchas cosas, ríos rojos, abismos muyyyyy profundos, un mar donde hay gente ahogándose, pelotas que rebotan repetitivamente en mi frente, pero sabe usted, aprieto los ojos, y paso a otro pensamiento, y a otro y a otro y a otro….

_ ¿Y dónde estás tú?

_ Yo a veces estoy en tierra, ahora estoy volando, soy un pájaro jajaja

_ ¿Por qué ríes?

_ Porque sentirme pájaro me da felicidad

_ Y si a ese pájaro, le dan un flechazo, en el ala y nunca más puede volar

Miro al negro, ya no quiero responder, o no puedo responder, veo un libro en su mano, lo señalo, me da el libro, lo abro, es una historia, comienzo a leerlo en silencio, pareciese como si la historia me absorbiera, estoy en ella, desaparezco de este mundo de sufrimiento, de dolor y de locura…

Leo, el libro más y más:

"En un amplio salón adornado con majestuosas estatuas, inmensas cortinas, y columnas de mármol, ingresa – súbitamente -  corriendo un hombre de vestimenta medieval y dice:

No tenemos un líder. El rey de Escocia ha muerto y no tiene herederos. La guerra se acerca por el Sur, desde donde Eduardo el Zanquilargo, el avaricioso rey de Inglaterra, ha vuelto de sus victoriosas campañas, en las que ha conquistado Gales y Francia. Ahora que dirige su atención hacia Escocia, la sombra del miedo atraviesa las montañas de las tierras altas de Escocia.

Las tropas Inglesas cuentan con miles de arqueros galeses, cientos de guerreros a caballo y docena de armas de asalto.

Nosotros los escoceses, solo tenemos un grupo de soldados sin entrenamiento que ni siquiera saben desfilar en línea recta. Debemos actuar rápidamente. Si tenemos una oportunidad de resistencia debemos formar un ejército cueste lo que cueste".

_ Señor_ le digo al gigante negro.

_ ¿Dime?

_ Los Ingleses están aterrorizando a toda Escocia, creo que ha llegado el momento de responder a sus ataques, si queremos vencerles, tenemos que aprender a marchar y luchar, Escocia, debe contar con soldados, pero si queremos hacer frente a las ambiciones de Eduardo el Zanquilargo, necesitaremos de muchas tropas y mucho oro en nuestros cofres, mire alrededor muy pronto los ancianos robles y piedras que nos rodea estarán pronto manchados por la sangre de los hombres de nuestros clanes.

El hombre me mira estupefacto, como si fuera una cosa extraña, o un extraterrestre, ¿acaso no sabe la gravedad del problema?, ¿no lo interesara, la vida de los escocés?, ¿Estará del lado de Eduardo el zanquilargo?

_ Billy, un ejército avanza al ritmo de su estomago, o eso dice un viejo refrán…vamos te invito a comer.-me dice el negro que no es caníbal.

Sigo leyendo, solo lo veo mover su boca, no escucho palabra alguno, le digo:

_ Nuestros clanes se han dedicado a la agricultura y al pastoreo de ovejas durante años…pero conseguir suficiente comida para alimentar a un ejército es mucho más complicado, sin una economía fuerte las magras tropas que hemos reunido se desintegraran otra vez. Para apoyar al ejército Escocés tendremos que aumentar los suministros en comida, madera, piezas de oro y piedra.

_Muy bien, Billy, ¡Billy!

Lo escucho, y sonrió, pues ya sé que es lo que quiero ser, cuando sea grande, voy a ser comandante de un ejército.

_ Escúchame pequeño, vamos a conseguir suministros de comida ¿te parece?-

_ Vamos, que esperamos _le respondo firme y fuerte, veo a gente que se voltea a mirarme.

_ Espera, iré a comprarte un buzo y un polo en la tienda que está al frente, ahora vengo, no me demoro, quédate quieto.

Asiento, pues debo aprender a ser recto, y hacer caso a la autoridad. Se aleja, se lleva el libro, quedo apenado, ahora que será de mi historia, o de la historia de Escocia, pude haber ayudado en algo, o de repente en nada, pues no valgo nada, eso me repite mi padrastro Juan, que no sirvo para nada.

Pero en matemáticas soy excelente, aunque ser el mejor en ese entretenido juego de números, hace que gente me hable, y demasiado, y no lo soporto, son muchas voces, se torna abrumador, tengo miedo, sudo, la cabeza me palpita, está a punto de explotar, tengo nauseas, me siento mal, mareado, no sé si me siento cansado, ¿siento?, algo raro, ¿sentir?, ¡va, sentir!. Recuerdo cuando fui al parque de las leyendas, fue hace tiempo,  me llevo mi padrastro. Y mientras Juan se fue a coquetear con un hombre muy gordo, yo  encontré una niña de peinado raro, parecían enredaderas sobre enredaderas, su rostro era muy blanco, estaba muy pintada como cuando mi tutor se pinta de noche, tenía el cuerpo frágil de pajarito, y su voz de canario ¿Por qué siempre menciono la palabra pájaro?, La niña me hablo con dulzura sentada en una grada, mientras observaba a los monos.

_ ¿Hola cómo te llamas niño?

_ Mi nombre es Billy

Era la primera vez, que una mujer  me habla una.  No sé cómo comportarme, agacho la cabeza, me pongo nervioso.

_ Que tal Billy, me llamo, Roxana, me dicen la Loca.

Loca, loca, loca, retumbaba en mi cabeza

_ Así me llaman, y es que creo que lo soy, me gusta la gente rara, tú por ejemplo pareces raro.

Raro, raro, raro, sonaba como timbre en mi trastornada cabeza, exteriormente sudaba.

_ Hoy huí de mi hogar, ¿Y sabes porque? Por qué mi padre viola todos los días a mi hermanita de 8 años, yo tengo 15, no lo voy a denunciar, porque soy mala, que sufra esa pequeña sabandija, pero… ¿Por qué lloras Billy?

_ No sé ¿Tienes padre?, yo no, solo  tengo padrastro.

_ No te pierdes de mucho, vamos, acompáñame, este es un lugar donde pasa mucha gente, te quiero enseñar algo.

Mi padrastro se acercaba, lo veía venir, ¿Me habrá visto?, de pronto  una fuerza deliciosa que nacía de mi parte genital, me impulso a  seguir a la frágil niña vestida de negro.

Llegamos a un lugar muy oscuro, árboles frondosos nos cubrían. Ella se hecho sobre el pasto, me dio la espalda, y no sé que hacía con unos papeles trasparentes, y unas ramas extrañas pequeñas, le pregunte.

_ ¿Qué haces?

_ Pues armo un troncho, si te portas bien, haré que lo des una piteada.

No la comprendía, no tenia curiosidad, me senté, la observe, era bella, de cuerpo frágil, de piel blanca, como la leche, como la luna, como…

_ Toma, agárralo suavemente…no te asustes

Retrocedí, ella me puso el troncho en la boca, como si fuera un biberón, sonreí, ella también, me dijo que aspirara, lo hice, tosí, me dijo que siguiera, lo hice nuevamente, tosí, mi garganta me apretaba, me dijo que lo siga haciendo, ella reía, lo hice, me gustaba su sonrisa, no sé cuantas veces lo hice, lo hice demasiadas, mi cabeza estaba por reventar, no articulaba palabra alguna, la veía, ella me miraba, era una Diosa, se dio cuenta, lo intuí, me dijo : vamos a bañarnos en el rio, que  era celeste, se veía las piedras, el mundo perdía su imagen, o su importancia, ella se desnudo, me dijo que haga lo mismo, estaba al borde de un colapso, ¡Santo dios!, la chica no tenia…

_ Apúrate, quítate toda la ropa, y vamos a bañarnos.

Lo hice, estaba desnudo, y también…

_ Mira, que mañoso eres, tienes esa cosa parada.

No me avergoncé, goce cada palabra, me lance al agua. Ella salió del rio y vi que se cambiaba, agarro mi ropa, y reía sin parar, hasta que me hizo aspaviento de despedida con su mano derecha tan blanca, quise salir, del rió celeste, no tenía fuerzas, o animo, entristecí, por un momento sentí placer, ahora siento pena, desnudo en medio del rió, llore mi desgracia.

Ese día mi padrastro, me encadeno en el jardín, después de gritarme por horas, después de darme de latigazos, A PESAR DE QUE después que los guardianes me sacaron del rió, donde al no sentir mi cuerpo, me eche en el agua y me hundía, y me ahogaba, esos guardianes del parque, me salvaron, y lo hicieron prometer a mi tutor de que me tratase con delicadeza, el asentía y me miraba de reojo con perversidad.

Dormí encadenado  en el frió jardín de mi pequeña casa, cuando  - mi padrastro - me desamarro, caí de bruces en el gras, el me dio varios baldazos de agua helada, solo recuerdo haber gritado como un mono del zoológico.

El negro de boquita pequeña, que no era caníbal, me trajo un buzo azul, un polo de color blanco, un par de sandalias, agradecí, fuimos a un restaurante, me invito pollo, de reojo, vi, que varias patrullas se detuvieron frente al restaurante, el negro se sobresalto, me agarro del cuello, policías lo apuntaban, escuche que uno de ellos comunicaba con un aparato que habían dado con el Narcotraficante “Nabu”, yo me agarre del brazo de Nabu, y todos le apuntaban con la pistola, ese era mi oportunidad de morir, me quede quieto, junto a mi querido gorila, reí, Al rato, una bala, ingresa a su hombro izquierdo, lo miro, me mira, él saca una pistola, me lanzo al suelo, mi polo se desgarra, de pronto una lluvia de balas, van a depositarse en su cuerpo gigantesco, en medio de los policías aparece mi padrastro, me llama con cariño:

_ Billy, hijo, ven con papá

Miro a los uniformados, ellos no me miran, a uno de ellos lo escucho decir, es un niño autista, no es esquizofrénico, dice otro, es oligofrénico dice un tercero. Me da mareos, quiero desmayarme no puedo, veo la sangre del negro, mi padrastro me agarra fuerte del hombro, lo detiene una mujer policía de cabello rubio.

_ ¿Es su hijo?

_ No es mi hijastro

_ ¡Y esos moreteados que tiene en la espalda! ¡Usted lo pega, acaso!

_ No, no es eso, el es loquito, fíjese, nació con un mal congénito, pero él se da cuenta de todo, lo que pasa, es que a veces solo a veces hace cosas irracionales, como golpearse

_ ¡¿Usted es homosexual no?!

_ Este…si, pero que tiene eso que ver, señorita policía

_ ¡Mucho!, ¡¿tiene pareja?!

_ Eso a usted no le incumbe.

No aguanto más, no hablo, grito, y con mucha coherencia, en mi mente acaba de aparecer la imagen de un gran orador, así me siento.

_ El es un mentiroso…señorita policía, desde que tengo uso de razón, siempre me ha pegado, con un alambre, con su correa, o con un látigo, me encadena en el jardín, a veces me enjaula y se burla, me baña violentamente a cada rato, llegan hombres a nuestra casa, el con ellos se besan y hacen cosas calatos, el me mira, me dice que aprenda hacer lo que él hace con los hombres, ahora está con un bigotudo, es flaco, feo y se llama Tom.

De pronto todo miran al capitán, pero si era él, ¡es el bigotudo!, esta sonrojado, todos ríen, lo molestan, otros fruncen su seño, La señorita policía, da un grito en el que todos se quedan estáticos, voltea hacia mi padrastro y le dice:

_ Hoy sus días de in humano acabaron maldito, ¡ha llegado  el momento de que sean inhumano con usted!. Ira  a la cárcel marica de mierda.

Sí, que tenía carácter la mujer, desde ese momento fue mi héroe o mi heroína.

Estoy solo en casa, mi heroína me dijo que recoja todas mis cosas de la casa, que – ahora esta sola - no sé porque, pero extraño a mi padrastro, sin él, esta casa no tiene vida, bajo al sótano, está oscuro, muy oscuro.

Estoy pisando con seguridad cada grada, debo recoger mi payaso de trapo, escucho pasos atrás mío, debe ser mi padrastro, comienzo a tener miedo, no me puede pegar, ya me ha pegado demasiado, además cuento con una heroína, siento unas garras sobre mi hombro derecho, me desespero, grito, me está ahorcando, pataleo, ¡¿Sera mi padrastro?! lo muerdo muy fuerte, más fuerte, rodamos por las escaleras, son muchas, siento mi cabeza tronada, dar vueltas y vueltas, siento el fétido aliento que emana mi verdugo que  cae conmigo, grita, siento su bigote rozar mi rostro, veo, apenas su rostro flaco, veo sangre, me dejo caer como un pajarito herido por una flecha, hasta el final de las escaleras, junto con el hombre de bigotes. Es Tom, el policía maricón, siento el frió suelo del final de las gradas, el hombre está desangrando, convulsiona, yo no reacciono, no puedo moverme, veo sobre una repisa  a mi payaso de trapo, esta sonriendo, sonrió apenas, vomito sangre, siento un fresco aire sobre mi ser, ¿Qué, he sentido?, si he sentido amor, por el negro Nabu, por la niña de cabellos extraños, por mi heroína vestida de policía, me siento amado, al rato ya no siento nada, mis ojos dejan de parpadear, solo quiero dormir…y después solo quiero volar.